Ante medio centenar de concurrentes, cuatro expositores plantearon la inconstitucionalidad, el anacronismo y los factores que obstaculizan la competencia en la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA), durante los dos primeros paneles del VII Encuentro Nacional de la Banda Ancha y el Cablemódem, organizados por la Asociación Argentina de Televisión por Cable (ATVC).

Carlos Winograd, ex secretario de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC); Andrés Gil Domínguez, profesor de Derecho Constitucional; Henoch Aguiar, ex secretario de Comunicaciones de la Nación y Alejandro Pereyra, ex Director de Asuntos Jurídicos del COMFER, desplegaron sus críticas.

Gil Domínguez encadenó la garantía a la propiedad, principio rector de la Constitución Nacional, con las limitaciones a las licencias de la LSCA para justificar la inconstitucionalidad de la norma. Aseguró que no basta con la indemnización para compensar los derechos adquiridos.

Winograd consideró, entre otros argumentos, que lo que más dinamiza la banda ancha es la competencia entre plataformas y que la fragmentación de las redes no sólo atenta contra eso sino que favorece la colusión. “Algo muy difícil de probar, luego, por las autoridades de defensa de la competencia”, dijo en base a su experiencia por dicho organismo.

Para Pereyra, que también es el candidato a integrar el directorio de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), en representación del Frente Amplio Progresista (FAP), “el Estado actúa (en el mercado audiovisual) como un operador más, pero con bolsillo de payaso”, a través de sus emprendimientos de TV digital, Argentina Conectada, satélites y ahora también telefonía celular. Resaltó que así se tiende a una competencia, por lo menos desleal y con la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia intervenida.

Cerró Aguiar con una recorrida por las distintas etapas de las innovaciones tecnológicas desde 1995, fecha a la consideró como punto de partida de la convergencia. Entre otras tendencias, resaltó que en el futuro el espectro de TV será utilizado para servicios móviles, porque las señales audiovisuales pueden circular por diferentes plataformas cableadas.

De este modo caduca, a su criterio, la necesidad de limitar la concesión de licencias en el terreno audiovisual, coincidiendo de este modo con los criterios de inconstitucionalidad de los límites de licencias ya planteados. Sugirió rever la legislación mirando al futuro.