Disputa por la TV satelital en Argentina y Brasil
Se pone caliente el futuro de la televisión satelital en la Argentina. El sistema panamericano Galaxy, que no pudo ofrecer su servicio DirecTV
Se pone caliente el futuro de la televisión satelital en la Argentina. El sistema panamericano Galaxy, que no pudo ofrecer su servicio DirecTV en nuestro país por la exclusividad que ostenta el Nahuel 1, está buscando un acuerdo con Artear (Canal 13), del Grupo Clarín, para cambiar la reglamentación que le impide competir con el consorcio local.
Algunas versiones indican que el acuerdo entre Artear y Galaxy (un conglomerado integrado por la norteamericana Hughes, el grupo venezolano Cisneros, Multivisión de México y la brasileña TV Abril) ya estaría firmado. Se explica así la ausencia de Canal 13 entre las señales del hasta ahora único sistema local de TV satelital Televisión Directa al Hogar (TDH) desde que éste comenzó a operar.
Según esta versión, Artear pondría su telepuerto para cumplir en parte con la reglamentación nacional, mientras quedaría en manos del poderoso Grupo Clarín el lobby ante las autoridades para tumbar la legislación que protege al Nahuel 1 o al menos encontrar los resquicios que permitan operar al nuevo actor.
Por otra parte, la venta de Imagen Satelital (que también posee un telepuerto) al Grupo Cisneros, accionista de Galaxy, tendría relación con la venta de contenidos para satisfacer la gran disponibilidad que el sistema posee gracias a su ancho de banda y la necesidad de hacer llegar esos contenidos al mayor numero de consumidores posibles para que den ganancias.
El nuevo sistema de televisión satelital cuenta en Argentina, por ahora, con un único licenciatario, TDH, un consorcio formado en 1995 por Paracom, el diario La Nación, Nahuelsat y G3 (integrado por Teacsa, proveniente del sector agropecuario, Tevycom y Monserrat).
Desde hace dos meses el 20% es de G3 y el 80% restante de la estadounidense Latin American Satellite Entertainment, Laser. En octubre de 1996 TDH emitió su primera señal a través del sistema provisorio de Nahuelsat. Hoy transmite desde el Nahuel 1, en Banda Ku.
Nahuel contraataca. En respuesta a la avanzada dchará la pisada de su satélite para transmitir DTH en Brasil, el mercado más importante de la región. El acuerdo, vía Embratel, se haría con KTV y con el grupo MÇOM Wireless. Ambas empresas ya cuentan con licencia para transmitir. Sería el tercer grupo que operaría en Brasil. El primero fue Galaxy (DirecTV), apoyado en el grupo Abril, y el segundo es Sky, de Rupert Murdoch y el grupo local Globo.
DirecTV tiene alrededor de 120.000 abonados en el país vecino que pagan entre US$ 25 y US$ 55, de acuerdo con la programación elegida, que puede llegar a 74 canales. El sistema tiene capacidad de llegar a 238, más 32 de audio. El costo del equipo es de US$ 599.
Galaxy Latin America lanzará un nuevo satélite en septiembre de este año (Galaxy VIII-I) que costó US$ 250 millones y cuenta con 32 transponders que serán utilizados para transmitir 102 canales de video, 43 para pay per view , 27 para información y entretenimiento, y 66 destinados a música.
Situación local. Según Martín Ratto, gerente general de TDH, la estrategia de la empresa en nuestro país es complementar al cable. Su target son los hogares ubicados fuera del área cableada, principalmente la zona rural, o los que cuentan con un servicio deficiente. En un futuro el objetivo es captar al nivel hi-tech.
En este momento tiene 8.500 abonados, aunque Ratto especificó que cuentan con 200.000 usuarios potenciales. Sus estimaciones de aquí a diez años son de 1.400.000 clientes, para lo cual invertirán US$ 40 millones entre 1998 y 1999.
Los actuales suscriptores pagaron $ 950 por el sistema, además de un abono mensual de $ 28 y $ 3 más si el abonado quiere canales premium. La instalación del equipo ronda los $ 80.
En julio se habilitará el servicio pay per view. Es casi seguro que el costo de suscripción bajará. El equipo -una antena de 60 centímetros de diámetro Alpha Star, un IRD (decodificador y receptor integrados) y un control remoto- se entrega en comodato.
En la Argen2 canales de TV, incluidos los de aire, con excepción de Canal 13, además de uno de audio. Para fines de junio, la oferta se duplicará, gracias al alquiler de un segundo transponder satelital, hasta llegar a los 36 canales de TV y 30 de audio en diciembre cuando, según estimaciones de la firma, contarán con 35.000 suscriptores.
Nada es fácil para DirecTV
Las expectativas de DirecTV, empresa de televisión satelital, están lejos de cumplirse. Los estudios previos al lanzamiento comercial del sistema hablaban de un servicio presente en 17 países y 700.000 suscriptores para fines de 1996. La realidad es distinta: sólo transmite en seis países y asoció a 150.000 personas. En Brasil los suscriptores cubrieron el 30% de lo previsto.
A la poca adhesión se agrega la falta de reglamentación de los países; en algunos no hay, por lo tanto DirecTV transmite sin dificultades. Distinto es el caso mexicano, donde Televisa, con fuertes vínculos gubernamentales, denunció el sistema como ilegal ya que no utiliza satélites nacionales.
Los competidores de la televisión satelital, los operadores de cable, prohibieron la publicidad de DirecTV en sus emisiones; en algunos casos, como el de Ted Turner, presionaron hasta quitar los anuncios. La opción es la publicidad en TV abierta, pero los costos son otros.
Es en Brasil donde DirecTV planea la ofensiva. Con 56 canales más 18 con el sistema pay per view, además del descenso de los precios de los equipos de US$ 599 a US$ 450 -se llegó a hablar de regalarlos-, esperan terminar 1997 mejor que lo que empezaron 1996.
Algunas versiones indican que el acuerdo entre Artear y Galaxy (un conglomerado integrado por la norteamericana Hughes, el grupo venezolano Cisneros, Multivisión de México y la brasileña TV Abril) ya estaría firmado. Se explica así la ausencia de Canal 13 entre las señales del hasta ahora único sistema local de TV satelital Televisión Directa al Hogar (TDH) desde que éste comenzó a operar.
Según esta versión, Artear pondría su telepuerto para cumplir en parte con la reglamentación nacional, mientras quedaría en manos del poderoso Grupo Clarín el lobby ante las autoridades para tumbar la legislación que protege al Nahuel 1 o al menos encontrar los resquicios que permitan operar al nuevo actor.
Por otra parte, la venta de Imagen Satelital (que también posee un telepuerto) al Grupo Cisneros, accionista de Galaxy, tendría relación con la venta de contenidos para satisfacer la gran disponibilidad que el sistema posee gracias a su ancho de banda y la necesidad de hacer llegar esos contenidos al mayor numero de consumidores posibles para que den ganancias.
El nuevo sistema de televisión satelital cuenta en Argentina, por ahora, con un único licenciatario, TDH, un consorcio formado en 1995 por Paracom, el diario La Nación, Nahuelsat y G3 (integrado por Teacsa, proveniente del sector agropecuario, Tevycom y Monserrat).
Desde hace dos meses el 20% es de G3 y el 80% restante de la estadounidense Latin American Satellite Entertainment, Laser. En octubre de 1996 TDH emitió su primera señal a través del sistema provisorio de Nahuelsat. Hoy transmite desde el Nahuel 1, en Banda Ku.
Nahuel contraataca. En respuesta a la avanzada dchará la pisada de su satélite para transmitir DTH en Brasil, el mercado más importante de la región. El acuerdo, vía Embratel, se haría con KTV y con el grupo MÇOM Wireless. Ambas empresas ya cuentan con licencia para transmitir. Sería el tercer grupo que operaría en Brasil. El primero fue Galaxy (DirecTV), apoyado en el grupo Abril, y el segundo es Sky, de Rupert Murdoch y el grupo local Globo.
DirecTV tiene alrededor de 120.000 abonados en el país vecino que pagan entre US$ 25 y US$ 55, de acuerdo con la programación elegida, que puede llegar a 74 canales. El sistema tiene capacidad de llegar a 238, más 32 de audio. El costo del equipo es de US$ 599.
Galaxy Latin America lanzará un nuevo satélite en septiembre de este año (Galaxy VIII-I) que costó US$ 250 millones y cuenta con 32 transponders que serán utilizados para transmitir 102 canales de video, 43 para pay per view , 27 para información y entretenimiento, y 66 destinados a música.
Situación local. Según Martín Ratto, gerente general de TDH, la estrategia de la empresa en nuestro país es complementar al cable. Su target son los hogares ubicados fuera del área cableada, principalmente la zona rural, o los que cuentan con un servicio deficiente. En un futuro el objetivo es captar al nivel hi-tech.
En este momento tiene 8.500 abonados, aunque Ratto especificó que cuentan con 200.000 usuarios potenciales. Sus estimaciones de aquí a diez años son de 1.400.000 clientes, para lo cual invertirán US$ 40 millones entre 1998 y 1999.
Los actuales suscriptores pagaron $ 950 por el sistema, además de un abono mensual de $ 28 y $ 3 más si el abonado quiere canales premium. La instalación del equipo ronda los $ 80.
En julio se habilitará el servicio pay per view. Es casi seguro que el costo de suscripción bajará. El equipo -una antena de 60 centímetros de diámetro Alpha Star, un IRD (decodificador y receptor integrados) y un control remoto- se entrega en comodato.
En la Argen2 canales de TV, incluidos los de aire, con excepción de Canal 13, además de uno de audio. Para fines de junio, la oferta se duplicará, gracias al alquiler de un segundo transponder satelital, hasta llegar a los 36 canales de TV y 30 de audio en diciembre cuando, según estimaciones de la firma, contarán con 35.000 suscriptores.
Nada es fácil para DirecTV
Las expectativas de DirecTV, empresa de televisión satelital, están lejos de cumplirse. Los estudios previos al lanzamiento comercial del sistema hablaban de un servicio presente en 17 países y 700.000 suscriptores para fines de 1996. La realidad es distinta: sólo transmite en seis países y asoció a 150.000 personas. En Brasil los suscriptores cubrieron el 30% de lo previsto.
A la poca adhesión se agrega la falta de reglamentación de los países; en algunos no hay, por lo tanto DirecTV transmite sin dificultades. Distinto es el caso mexicano, donde Televisa, con fuertes vínculos gubernamentales, denunció el sistema como ilegal ya que no utiliza satélites nacionales.
Los competidores de la televisión satelital, los operadores de cable, prohibieron la publicidad de DirecTV en sus emisiones; en algunos casos, como el de Ted Turner, presionaron hasta quitar los anuncios. La opción es la publicidad en TV abierta, pero los costos son otros.
Es en Brasil donde DirecTV planea la ofensiva. Con 56 canales más 18 con el sistema pay per view, además del descenso de los precios de los equipos de US$ 599 a US$ 450 -se llegó a hablar de regalarlos-, esperan terminar 1997 mejor que lo que empezaron 1996.